La mona, protagonizada por un peluche gigante en forma de caballo y un gran número de chocolates, será en esta ocasión para los más pequeños del centro Paidós de Santa Coloma de Gramanet, cuyo objetivo es ayudar a los niños y a las familias que viven con pocos recursos y con alto riesgo de exclusión social.
“Es un acto simbólico, un pequeño gesto para nosotros pero un regalo a la infancia”, declaró Emilio Zegrí, presidente de la Fundación Real Club de Polo de Barcelona.
Los representantes de la BECH, así como los principales responsables del Real Club de Polo, mostraron su agradecimiento al tenista y padrino del acto, Martín de la Puente, embajador del Real Club de Polo de Barcelona y representante de sus valores deportivos y éticos en todo el mundo, siempre dispuesto a colaborar en causas de colectivos vulnerables. Martín aseguró que “es un honor que el club haya pensado en mí. Es muy especial que una entidad tan grande como el Polo se acuerde de ayudar a los más pequeños. Con este pequeño grano de arena se acaba formando una gran montaña”.
Anna Roig, por su parte, agradeció la entrega y destacó que “si esta entrega nos emociona a nosotros, no os podéis imaginar la alegría de los niños cuando vean la Mona. Estamos muy agradecidos por este gesto. Es un signo de que todos somos responsables de todos y por ello tiene una gran capacidad simbólica”.
La BECH es un ambicioso proyecto de promoción impulsado por el Ayuntamiento de Barcelona y el Real Club de Polo de Barcelona, con el objetivo de acercar el mundo del caballo a la sociedad en general. Consta de cuatro ejes: deporte, salud, educación y cultura. Precisamente, la acción celebrada esta tarde se encaja dentro del eje cultural.
- Fotos: @Nacho Olano
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