Cualquier época del año es buena
para una escapada a Roses, a disfrutar de su patrimonio cultural, sus
playas, caminos de ronda, parques naturales, huellas arqueológicas, gastronomía…
Pero ningún momento es tan especial como este fin de semana en que su
majestuosa bahía cobra un color especial: el que le confieren casi una
treintena de veleros trimarán haciendo giros por sus encabritadas olas,
agitadas por el viento de la tramuntana.
Y es que hoy y mañana, Roses se
viste de gala para recibir con todos los honores al Tour de Francia… de
Vela! Porque hay otro Tour que no discurre sobre dos ruedas, subiendo y
bajando puertos de montaña, sino navegando y sorteando boyas. Esta prueba, una
de las más espectaculares que puede verse en el mundo de la náutica, cumple
este año su 40 edición y ha vuelto a apostar por Roses para que acoja la
única de sus nueve etapas que no se desarrolla en aguas francesas. Y además por
séptima vez.
La presentación de la etapa rosense
del Tour de Francia de Vela ha tenido lugar esta mañana en el Club Náutico,
presidida por la Alcaldesa de Roses,
Montse Mindán, quien ha señalado: “estamos muy contentos de traer por séptima vez a Roses el Tour de
Francia de Vela, pasando de 23 a 29 barcos, lo que supone todo un espectáculo
en las playas de nuestra bahía”.
También ha tomado la palabra el Presidente
de la Estación Náutica –y de la Asociación de Camping de Girona– Miquel
Gotanegra, que ha comentado: “en
2006, cuando empezamos a plantearnos competir, el Tour era un sueño que por
suerte hemos hecho realidad. Nuestra presencia supone proyectar Roses a nivel
internacional”.
Especial espectación ha despertado
la presencia de Rubén Castells, uno de los tripulantes del primer
velero español que compite en el Tour, el New Territories y que además está
haciendo una gran competición, pues en su debut marcha en el puesto 14,
justo en la mitad de la clasificación, todo un éxito para un trimarán sin
experiencia en el Tour. “Estamos muy
orgullosos de particupar en el Tour y sobre todo de competir hoy en casa.
Nuestro propósito en esta edición es disfrutar compitiendo y aprender de cara al próximo año”.
Hoy viernes se desarrollará la Regata Costera, recorrido de larga distancia pero visible desde Roses,
en la que los 29 veleros salen al mismo tiempo para recorrer unas 40 millas (74
kilómetros). Y mañana sábado, 22 de julio, tendrá lugar la aún más
espectacular Regata Corta, muy cerca de la playa. En una primera
fase, los equipos se dividen en dos grupos, cada uno de los cuales disputa 6
regatas. Los cuatro mejores de cada grupo, ocho en total, competirán
posteriormente en la regata final.
El precioso skyline de Roses, con la Ciudadela y el Castillo de la
Trinitat brillando con
luz propia, servirá de improvisada platea, desde la
playa y los espigones, para seguir con atención el desarrollo de las regatas. Y
terminadas estas, el espectáculo se trasladará al village, donde animación musical, tenderetes
donde adquirir productos vinculados con la náutica, atracciones para los
niños, pruebas deportivas y muchos regalos harán las delicias del
público presente.
El caprichoso destino ha querido
que este mismo sábado, terminada la etapa y proclamados los vencedores, la
Ciudadela acoja el concierto que Tom Jones, el ‘Tigre de Gales’, ofrecerá
dentro del Festival Sons del Món, todo un clásico veraniego en el Alt
Empordà. Y como fin de fiesta, el domingo 23 habrá un castillo de fuegos
artificiales en la playa Nova, inmejorable forma de despedir al Tour de
Francia de Vela, que proseguirá en aguas francesas sus tres restantes etapas
hasta el 30 de julio y concluirá en Niza.
- Edición periodista Jussara Maria Pires de Moura
- Imágenes cortesía de asesoría de prensa
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